Un negocio de comercio electrónico no solo es una plataforma tecnológica, que es lo que los usuarios pueden ver cuando navegan por Internet en busca de productos, sino que también se compone de otros sistemas integrados a la misma a los cuales el cliente no puede acceder pero que son necesarios para poder gestionar el negocio.

La distinción que podemos hacer es bastante sencilla:

En primer lugar tenemos el Front-end que seria la plataforma o sitio web a la que los usuarios tienen acceso. Los equipos que se requieren son simples y no son muy costosos.

En segundo lugar hay el Back-end que son los sistemas que permiten gestionar el negocio a los que acceden los web manager a través de una clave. Aunque los equipos que se requieren son costosos y potentes.

Todos los procesos se deberían establecer de la siguiente manera:

Front-Office:

-Catálogo productos

-carrito de compra

-Promociones

-Buscador

-Registro y área de usuarios

Procesos en tienda:

-Recepción del pedido

– Validar pedido y cliente

-Facturas

-Cobros

Logística y almacén:

-Compras

– Almacenamiento

-Gestión stocks

–Picking y packing

-Tracking de pedido

-Entrega a domicilio

Atención al cliente:

-Soporte multicanal

-Gestión de emails (recepción y envío)

-Análisis de navegación de usuarios

-Integración con redes sociales