Según las pruebas realizadas, Samsung ha anunciado lo que puede ser un cambio sustancial para los smartphones: una pantalla irrompible. Esta innovación resuelve el famoso problema de la fragilidad de los móviles y podrá aplicarse a otros ámbitos.

La empresa coreana asegura que su nuevo panel puede llegar a resistir unas 30 caídas consecutivas desde una altura de 1,8 metros. Las pruebas han sido certificadas por Underwriters Laboratories, empresa americana encargada de realizar este tipo de tests.

El material de las nuevas pantallas podría usarse en coches, dispositivos militares, u otros dispositivos tecnológicos. Este material llamado OLED supera a las actuales pantallas tanto en flexibilidad como en transmisión táctil, dureza y peso.

Samsung espera que la nueva pantalla pueda verse en sus productos en un futuro próximo, donde realmente se verá si la característica “irrompible” es real o solo una estrategia de marketing.